Una antigua tecnología de hace más de 1.500 años podría ayudar a Lima, la capital de Perú, a resolver el acuciante problema de sequía y de las restricciones de agua en la región.
En la capital de Perú, al igual que en muchas ciudades ubicadas en esta zona, donde se registran muy pocas precipitaciones al año y la época seca suele durar en torno a siete meses. Tras un año especialmente poco generoso en lluvias, los habitantes de Lima afrontan restricciones para alargar al máximo las reservas existentes.
En la capital de Perú, al igual que en muchas ciudades ubicadas en esta zona, donde se registran muy pocas precipitaciones al año y la época seca suele durar en torno a siete meses. Tras un año especialmente poco generoso en lluvias, los habitantes de Lima afrontan restricciones para alargar al máximo las reservas existentes.