sábado, 20 de julio de 2013

Protegen especies marinas y terrestres en cayos del sur cubano



Especialistas cubanos desarrollan un programa para la protección de cinco tipos de animales marinos y terrestres en el parque natural Jardines de la Reina, en el litoral sur de la región central de Cuba.
Raúl Díaz, director de la Empresa para la Conservación de la Flora y la Fauna en Ciego de Avila, señaló a Prensa Latina que trabajan con la iguana, tortugas marinas, manatí, jutía y el cocodrilo................
..................................americano, especies declaradas en período de extinción.

Resaltó que se realizan monitoreos para proteger la vida y mantener el hábitats de dichos animales, algunos endémicos de la isla o de la zona, los cuales están muy amenazados por el cambio climático y la caza furtiva del hombre.

En el caso de la iguana se analiza su comportamiento porque a pesar de tener una alta tasa de reproducción en condiciones naturales, un gran por ciento de los neonatos mueren antes de llegar a la adultez.

Allí los ejemplares de ese reptil se miden, pesan y marcan con el objetivo de valorar el indicador de salud de su población, la cual muestra síntomas de desnutrición a causa de la sequía, pues se alimentan, fundamentalmente, de mangle.

También estudian las jutías conga y conguina, esta última endémica local, para conocer época de reproducción y forma de vida.

Puntualizó que el cocodrilo americano (acutus) es otra de las especies abundante en la zona y sometido a indagaciones, principalmente, los animales jóvenes de poco más de un metro de tamaño, provenientes de la provincia de Camagüey.

Los cayos de Ana María, área protegida de la flora y la fauna, constituye el principal sitio de desove de tres de las cuatro especies de tortugas marinas existentes en la Isla: el carey, la verde y la caguama.

Jardines de la Reina abarca a los territorios de Camagüey, Ciego de Ávila y parte de Sancti Spíritus y está considerada uno de los archipiélagos mejores conservados de los cuatro que rodean a Cuba.

Posee más de 100 kilómetros cuadrados, está formado por unos 600 cayos e islotes y lo distingue el buen estado de los arrecifes coralinos, la alta productividad de los manglares y los pastos marinos.

Allí se ejecutan dos estaciones biológicas, una en cayo La loma y otra en Cayo Caballones, que serán las encargadas del monitoreo, conteo y protección de las especies marinas y terrestres que habitan en la zona, y de la conservación de los ecosistemas.

Agencias/SimaCaribe 20 jul 2013