Ser ecológico es un compromiso con el medio ambiente y, si bien supone la necesidad de hacer cambios en nuestro estilo de vida, es necesario para ayudar a reducir la contaminación del planeta en el que vives tú y tus hijos y la emisiones de CO2 responsables del calentamiento global.
Pensar en verde es menos complicado de lo que crees. Pequeños gestos y un cambio en los hábitos de vida pueden generar un gran beneficio en el medio ambiente. Lo más importante es reducir el consumo y adquirir sólo aquello que se necesita de verdad. La clave está en reciclar: todo aquello que compres puede ser reutilizado para el mismo fin o para uno diferente, échale imaginación: esa caja de madera que puedes convertir en mesa...
Es muy importante que involucres a los más pequeños de la casa en los cambios de hábitos y les enseñes a reciclar. No sólo lo aprenderán rápidamente, sino que lo interiorizarán y harán de forma natural en el futuro.
Agencias/Simacaribe 19/02/15