sábado, 18 de junio de 2011

Las migrantes tortugas marinas

El sonido de las olas, el fuerte sol y la cálida arena forman parte del escenario perfecto que acoge a un reptil encantador conocido como tortuga marina, que con su lento caminar busca un sitio donde anidar en las playas ecuatorianas.


El océano es abandonado únicamente por las hembras que recorren las costas por las noches para colocar sus huevos en las zonas más altas donde exista arena seca. Al hallar el sitio ideal, inician la excavación con sus aletas traseras y poco a poco van formando un cilindro de unos 50 centímetros para depositar entre 50 y 250 huevos, dependiendo de la especie.

Por el mar, estos animales migran por miles y miles de kilómetros. En su travesía van en busca de alimentación y de un sitio de anidación, pero es admirable cómo, después de décadas de haberse alejado, regresan al lugar donde nacieron. 

Franja especial
De norte a sur, las provincias costeras de Ecuador son consideradas como las únicas zonas de anidación del Pacífico de América del Sur para estos reptiles. 

Estos carismáticos animales con caparazón duro llegan todos los años a Esmeraldas, Manabí, Santa Elena, Guayas, El Oro e inclusive a Galápagos para alimentarse, aparearse y anidar.

Su recorrido por aguas del país es fundamental para el equilibrio ecológico porque trasladan nutrientes y remueven la arena cuando anidan. No se puede dejar de lado que, gracias a su alimentación, mantienen saludables los ecosistemas al ingerir peces, crustáceos, medusas y esponjas.

Amenazas
Su caminar pausado y su dependencia del mar y de la arena para la supervivencia las vuelven más vulnerables. Si están en el agua encuentran peligro y si salen a la tierra también las asechan las amenazas.

Su fragilidad al nacer es uno de los mayores riesgos. Sus huevos, al estar al aire libre, se convierten en presa fácil de animales introducidos como perros o cerdos, inclusive se observa a los seres humanos recolectarlos para su consumo. Pero los problemas no quedan ahí, cuando son neonatos inician su recorrido en busca del mar y se guían por el brillo de la Luna y de las olas, sin embargo las luces artificiales pueden confundirlos y desorientarlos.

El ser capturados intencional o incidentalmente sigue siendo una amenaza porque, a pesar de tener varias crías, se estima que solo una de cada 1.000 llegan a ser adultos.

Finalmente, en el medio acuático mientras se desplazan son víctimas de la contaminación con químicos o desechos. Por lo general, una tortuga suele confundir las fundas plásticas con su comida (algas o medusas) y al ingerirlas llegan a morir.

Estos animales milenarios siguen cada día en mayor peligro por la acción de la mano humana. Así, su conservación es vital para el equilibrio ecosistémico.

El dato
En Ecuador existen cinco tipos: verde, carey, 
golfina, laúd y cabezona.

La tortuga laúd es la especie más grande de tortugas marinas. Pueden llegar a tener caparazones de dos metros de largo.


Características 
Particularidades 

° Se estima que la madurez sexual está entre los 12 y 50 años. Todo depende de la especie, la temperatura o la alimentación.

° Se cree que luego de alcanzar la madurez sexual tienen cerca de 30 años más de vida reproductiva activa.

° Nadan la mayor parte del tiempo cerca de la superficie.

° Pueden permanecer hasta cinco horas bajo el agua sin salir a respirar.

Todo a apoyar

A nivel nacional, el Ministerio de Ambiente, Conservación Internacional, Fundación Metis y Fundación Equilibrio Azul están emprendiendo una campaña de concienciación a la comunidad para conservar a las tortugas marinas.

Pablo Santillán, director ejecutivo de Metis, recomienda que las personas que visitan las playas o las áreas protegidas de la costa ecuatoriana tengan mucho cuidado de no contaminar ni alterar los sitios de anidación de esta especie.

Además, exhorta a los gobiernos locales a establecer límites y controles de las zonas establecidas como sitios de anidación.