Millones de sardinas procedentes del océano Atlántico han comenzado su migración anual a lo largo de la costa sudafricana en dirección hacia el Índico, en lo que se conoce como la mayor migración animal del planeta.
"Es un fenómeno que ocurre cada año, pero no todos los años puede observarse con la misma intensidad", explicó hoy Ann Kunz, bióloga marina del acuario Ushaka, en la ciudad de Durban, en la costa oriental de Sudáfrica.
Los primeros bancos empezaron a ser avistados en la jornada de ayer en la costa sureste de Sudáfrica, en aguas del océano Índico, y continuarán recorriendo las aguas del país hasta finales del mes de julio.
Cada año, bancos de sardinas de millones de ejemplares que pueden alcanzar los 20 kilómetros de largo y los 60 metros de profundidad emprenden viaje desde las aguas del Atlántico arrastradas por una corriente de agua fría.
Alrededor de los bancos de sardinas, centenares de especies predadoras, como peces, aves, focas, tiburones y delfines, persiguen a las sardinas a lo largo de 1.500 kilómetros de costa, lo que desata la mayor cacería del reino animal.
"Si la dirección del viento es la adecuada los bancos se acercan a la costa y las sardinas se pueden capturar con redes desde la playa, y puede verse desde tierra la cacería", añadió la bióloga.
Pese a lo espectacular de la migración, sólo un 5 por ciento de las sardinas de las aguas sudafricanas realiza este viaje hacia el Índico, según Kunz.
Las sardinas acaban dispersándose cuando la corriente fría que las transporta acaba por calentarse en contacto con las aguas templadas del océano Índico.
Kunz apuntó que en realidad "no se trata de una migración propiamente dicha. Las sardinas no realizan el recorrido con el propósito de reproducirse o desovar, simplemente siguen esta corriente por razones circunstanciales".
En este sentido, la bióloga aseguró que no existe ninguna conexión entre la tradición de comer sardinas en la noche de San Juan, del 23 al 24 de junio, en Europa, y el masivo movimiento de esta especie en el cono sur.
"El mes de junio y julio no marca la época de cría ni apareamiento de la sardina, y ninguno de estos millones de ejemplares viajarán hacia Europa", afirmó Kuntz.
La migración de sardinas de Sudáfrica es un reclamo turístico que atrae cada año a miles de fotógrafos de naturaleza y visitantes a las costas del sureste del país, donde se realizan numerosos festivales de degustación de sardina hasta entrado el mes de agosto.
Agencias/SimaCaribe 26 jun 2011