Los bañistas de las aguas de las islas baleares podrán conocer a partir de ahora la cantidad de medusas con las que se pueden encontrar en su inmersión, gracias a la creación de una herramienta de predicción, liderada por el Servicio de Recursos Marinos de la Dirección General de Medio Rural y Marino del archipiélago balear y pionera en Europa.
El conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, ha presentado hoy los primeros resultados..... obtenidos de esta herramienta que recoge de forma científica y sistemática en un aplicativo web los datos de las medusas detectadas, informa el Govern.
Desde la puesta en funcionamiento de la nueva herramienta, el verano pasado, se han realizado 17.507 observaciones, de las cuales en 799 casos se detectó la presencia de medusas.
La especie más abundante ha sido Pelagia noctiluca, seguida por la Cotylorhiza tuberculata y la Rhizostoma pulmo.
La aplicación permite filtrar la información por lugar o período de tiempo y cuenta con un mapa que muestra los puntos con mayor abundancia de medusas.
Esta herramienta, que se ha puesto en marcha con recursos propios, se empezó a gestar el verano de 2013 a raíz de la aparición de varios bancos de medusas en el litoral balear.
Así, se creó un grupo de trabajo interdisciplinar con el fin de estudiar este fenómeno y elaborar protocolos de actuación.
El proceso consiste en compilar las observaciones diarias que se realizan en cinco reservas marinas a cargo del personal de Semilla, en 33 rutas de las barcas del servicio de Abaqua de limpieza del litoral, y en 120 playas, donde el seguimiento es a cargo de los socorristas de la Dirección General de Emergencias.
De este modo, se observa la llegada de bancos de medusas desde las aguas abiertas hasta las aguas de baño.
El objetivo final reducir los efectos sobre los bañistas y el turismo, y ampliar el conocimiento científico sobre este fenómeno natural.
Este instrumento ayuda a entender la relación entre las condiciones ambientales y la aparición de medusas, lo que permitirá la implementación futura de un sistema de predicción de medusas y de mitigación de sus efectos, que se estima que pueda ser una realidad en aproximadamente unos cinco años.
En este proyecto participan varios departamentos del Govern que trabajan de forma coordinada por primera vez con diferentes instituciones científicas (SOCIB, el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados IMEDEA-CSIC y el Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía ICMAN-CSIC), y en este primer año también ha contado con la colaboración de los ayuntamientos de Alcúdia y Muro.
Agencias/Simacaribe 12/03/2015